Este reporte presenta el Modelo Global de Riesgo y Resiliencia (GIRI) y su Índice, un modelo de riesgo completamente probabilístico que abarca los sectores globales de la infraestructura. Actualmente, el GIRI aborda seis riesgos naturales: terremotos, tsunami, deslizamientos, inundaciones, ciclones tropicales y sequías, los tres últimos incorporando modificaciones inducidas por el cambio climático, proporcionando métricas de riesgo hidrometeorológico relacionadas con varios escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero en el futuro. El GIRI también amplía su cobertura a nueve sectores de infraestructura: energía, carreteras, ferrocarriles, transporte, agua y saneamiento, comunicaciones, petróleo y gas, educación, salud y vivienda.
El GIRI presenta las siguientes características clave:
1. Flexibilidad y escalabilidad: Sirviendo como un marco métrico y de modelado, el GIRI evalúa el riesgo de desastres en sistemas de infraestructura que respaldan actividades socioeconómicas. Esta adaptabilidad permite la expansión potencial para incluir otros riesgos y sectores;
2. Enfoque probabilístico: El GIRI emplea una metodología completamente probabilística, proporcionando métricas probabilísticas e integrando el cambio climático a través de estimaciones de probabilidad imprecisas;
3. Incorporación del contexto socioeconómico: Reconociendo la complejidad del riesgo de desastres, el Índice GIRI integra variables de contexto socioeconómico que agravan el riesgo, proporcionando información sobre el rendimiento de la resiliencia de un país;
4. No estacionariedad: La inclusión de modificaciones inducidas por el cambio climático hace de GIRI una evaluación pionera que incluye la no estacionariedad en su modelo y resultados.